El talón de Aquiles del audiovisual: cómo detectar tus puntos débiles antes de que te chille un productor
Todos tenemos una vulnerabilidad que puede hundirnos en el momento menos esperado.
En la industria audiovisual —tan cambiante y exigente— no basta con esconder los defectos: hay que reconocerlos, trabajarlos y convertirlos en fortalezas.
La autocrítica, la formación constante y la curiosidad son las armas que te blindan frente a tu propio “talón de Aquiles”.
Bien, todos conocemos la historia de Aquiles, ¿verdad?
Un tipo cuya madre lo sumergió en aguas divinas para convertirlo en inmortal. Pero al tenerlo cogido por los talones fue eso lo que se quedó fuera.
La historia ya la sabemos: Durante la Guerra de Troya, Aquiles fue asesinado por una flecha envenenada que impactó en su talón, su único punto débil.
Seamos honestos.
Para conseguir que nuestra candidatura sea atractiva, tenemos que reforzar nuestros puntos débiles.
Tenemos que conseguir que no nos pillen y evitar que se desmorone todo el castillo.
Y no me vengáis con eso de “es que yo soy perfecto”.
Mentira. Todo el mundo tiene defectos.
Así que seamos autocríticos.
Pregúntate:
● ¿Cuáles son los comentarios que suelo recibir sobre mi trabajo?
● ¿En qué siento que me falta confianza?
● ¿Hay herramientas o habilidades que debería aprender para dar el siguiente paso?
