Las 12 grandes dudas y soluciones para conseguir nuevos proyectos audiovisuales

Cuando empecé, me hubiese gustado tener un «tutor audiovisual». Alguien que me guiase entre los vaivenes de la industria.

Pero también pienso que, quizá, no hubiese aprendido cosas a las que solo se llega mediante el tropiezo.

Lo cierto es que cada año se estrenan más de 400 proyectos entre cine y televisión (cortos, largos, animación, programas de entretenimiento...), según el Informe Anual del Gobierno de España.

Eso significa que miles de personas intentan colarse en un sector lleno de incertidumbre.

En este artículo voy a enfrentarme a 12 preguntas clave para descubrir cómo se entra realmente en esta industria, para luego permanecer y resistir los vaivenes de trabajo y sequía.

Son temas sobre cómo acceder, hacer contactos y conseguir nuevos proyectos audiovisuales. Cualquier profesional de este medio (yo incluido), antes o después se enfrentará a alguna de estas situaciones.

Para lograrlo, voy a abordarlo en tres niveles: desde los mitos más repetidos, hasta los hechos que pocos hablan, así como los casos prácticos que han funcionado bien.

¿Es tan difícil como lo pintan o es que hay que darle otra vuelta de tuerca?

A modo de índice, estas son las 12 cuestiones que trataremos:

1. «Escribo y me pongo en contacto con productoras, pero no responden. No sé cómo entrar al círculo de sus contactos. ¿Qué hago?»
2. «¿Qué pasos debería seguir durante las prácticas de la carrera para tener un buen futuro en el mundillo audiovisual?»
3. «¿Cuándo enviar el curriculum para que coincida con el momento donde hay más movimiento y cambios en las redacciones, maximizando oportunidades?»
4. «¿Cómo empiezo a usar LinkedIn para que me conozcan si aún no tengo contactos?»
5. «¿Cómo buscar un productor o coproductor para mi largo/cortometraje?»
6. «Llevo tiempo trabajando en el sector y estoy desempleado, ¿cuál es el mejor camino para conseguir proyectos nuevos?»
7. «No tengo experiencia demostrable para hacerme un buen portfolio, ¿qué podría hacer?»
8. «Llevo tiempo solicitando ofertas de trabajo y aunque me han salido pocas entrevistas, no sé por qué no acabo siendo seleccionado/a.»
9. «¿Cómo conseguir financiación para un proyecto de ficción o documental?»
10. «¿Dónde puedo encontrar más ofertas de trabajo aparte de las portales oficiales?»
11. «¿Qué puedo hacer para enseñar mi trabajo y que conozcan mejor lo que hago?»
12. «¿Qué puedo hacer en los "momentos valle" donde no tengo proyectos profesionales a la vista?»

¿Has sentido alguna de estas preocupaciones alguna vez?
Dentro encontrarás casos concretos, reales y prácticos.
Casi como una guía paso a paso.
¡Vamos a responderlas una a una!

1. «Escribo y me pongo en contacto con productoras, pero no responden. No sé cómo entrar al círculo de sus contactos. ¿Qué hago?»

Conseguir respuestas de productoras o ejecutivos es una cuestión de conseguir su atención. Ni más ni menos. Su atención es limitada y dividida entre mil cosas. Por eso, te la juegas en segundos.

Te invito a revisar 3 cosas clave: el mensaje que les escribes, el canal por el que se lo envías y si haces un seguimiento los días posteriores. Esta última acción es la que suele dar muchas alegrías.

A) El mensaje: normalmente, si el primer mensaje que le escribes suele ser para pedir algo sin molestarse lo más mínimo en conocer las necesidades de la otra persona, o de aportarle algo, suele acabar en la carpeta de «no leídos».

El mensaje es la oportunidad de captar su atención en pocas frases. Es la ventana para ponerte en su radar. Cuídalo.

B) El canal: todo el mundo envía correos electrónicos adjuntando su curriculum. Eso lo hacen cientos y cientos como tú. Te invito a pensar qué otro canal de contacto podrías usar para diferenciarte y establecer primero una relación de confianza y familiaridad. Por ejemplo, yo uso mucho los chats directos de LinkedIn. Primero solicito conexión a esa persona. Cuando la acepta, le escribo un párrafo breve, preguntándole algo o interesándome por algo que ha hecho (algún proyecto, post que haya escrito o similar). A partir de ahí, ya no es un correo pidiendo algo. Ya es una conversación natural y progresiva.

Otro canal disruptivo es enviar una carta postal. Sí, como lo lees. ¿Quién envía cartas postales actualmente? Muy pocos, casi nadie. Pues ahí está el hueco para diferenciarte. Coge la dirección postal de la empresa, y envíasela. Espera unos días y prueba a ver. Esta estrategia la han hecho varios creadores, enviando una "paloma mensajera". Curioso, sí. Pero han visto maximizada su tasa de respuesta. Al final, lo que consiguen es la atención de quien les tiene que contratar. Hacen algo que les sorprenden.

C) El seguimiento: esto es la frecuencia con la que insistes en los días posteriores. Es la manera de decirle al otro que tienes mucho interés en que salga adelante.

A mucha gente le da palo volver a escribir días después para ver si han leído tu propuesta, para preguntarles si es el mejor momento para hablar con ellos, o simplemente para descartarlo. No se trata de escribir una vez más, sino de hacerlo 3 y 4 veces, hasta que respondan, aunque sea por pesadez.

Te cuento mi caso concreto.

En julio de 2025, tenía un proyecto documental que quería presentar a una productora con la que nunca había tenido relación.

Lo primero fue encontrar el mail de los productores ejecutivos. Una vez los había localizado, le escribí el primer correo un 6 de agosto de 2025.

En ese mensaje, les contaba en 3 líneas de qué iba el proyecto, quién era yo, y por qué ese proyecto era importante que se hiciera. Breve y conciso. No envié ningún dosier. Tampoco ningún pdf no solicitado.

Lo que hice fue terminar el mensaje preguntando si estaban actualmente abiertos a producir proyectos de ese tipo. Fin.

Pues bien, no responden.

Pasan días, semanas, y sigo sin saber nada de ellos.

El 21 de agosto vuelvo a escribirles. Sabía que estarían de vacaciones, pero necesitaba alguna respuesta. Así que les digo lo siguiente:

¡Buenas tardes!
Espero que el verano esté yendo muy bien.
¿Veis inviable desarrollar a partir de septiembre un proyecto con ese enfoque?
Gracias.

Automáticamente, al día siguiente, el 22 de agosto a las 15:20, me responden:

Bingo. Ya tengo una respuesta, aunque sea negativa. Ya sé que por ahí no es, así que me permite seguir avanzando por otros lados, evitando atascarme en un correo o en una productora. Spoiler: ese mismo proyecto, semanas más tarde, lo encajé en otra productora de Madrid.

Por último, también hay que considerar que las bandejas de entradas de productoras y responsables están hipersaturadas. Les escribe mucha gente, muchas gestiones, proyectos, tareas... A veces ni siquiera ven el mensaje. Por eso, nada tiene que ver con que no les llegues a interesar o tengan algo contra ti.

2. «¿Qué pasos debería seguir durante las prácticas de la carrera para tener un buen futuro en el mundillo audiovisual?»

Las prácticas son la primera ventana por la que entras al sector. Elegirlas bien podría marcar tus siguientes 5 años dentro de la industria.

Fíjate. Hay bastante evidencia científica que relaciona el desempeño con las prácticas extracurriculares con la calidad laboral y el desarrollo laboral en los años posteriores.

Un estudio reciente de unos investigadores de la Universidad de Sheffield (Reino Unido), concluye que las personas con mayor implicación durante sus prácticas extracurriculares tuvieron de forma consistente mayores tasas de empleo, mejores salarios y habilidades más positivas.

Además, otra investigación clásica (Stuart et al., 2011) con estudiantes británicos midieron la relación entre implicarse mucho en el trabajo durante las prácticas con una mayor velocidad de transición al mercado laboral. En otras palabras, aquellos que mejor desempeño tenían cuando eran becarios encontraban trabajo más rápido luego.

Por tanto, hacer buenas actividades extracurriculares sí se asocia con mejores salidas laborales.

En mi caso concreto, casi el 90% de los trabajos que he conseguido en los últimos 5 años me han venido gracias a los contactos que hice durante mis prácticas.

La lógica que yo usé en su día es la siguiente.

Yo estudié periodismo. Mientras el resto de mis compañeros de universidad escogían grandes corporaciones como el ABC o Cadena Ser, yo investigué una a una todas las empresas disponibles con convenios.

Vi que había una muy pequeñita, que tenía un programita cultural de televisión a punto de arrancar. Pensé que, al ser tan pocos el equipo de trabajo (eran 4-5 personas), me permitiría intervenir más en la producción y tener una mayor presencia. En lugar de ser el becario que lleva los cafés, yo quería aportar lo máximo que pudiera a la producción. Quise actuar como un trabajar más en plantilla, no como un estudiante que tenía que rellenar créditos a su expediente.

Pues bien. Terminé siendo ayudante del director. Más tarde, el guionista me ofreció varios proyectos durante los siguiente años, y a partir de ahí, fui tejiendo una red de confianza y recomendaciones que me permitó trabajar en proyectos televisivos muy bonitos.

En resumen: opté por algo pequeñito, para poder ser proactivo. Y sorprender. Sorprender y sorprender. Esa fue la premisa.

3. «¿Cuándo enviar el curriculum para que coincida con el momento donde hay más movimiento y cambios en las redacciones, maximizando oportunidades?»

En el sector televisivo, se dice que hay dos grandes temporadas: la de febrero a junio, y la de septiembre a enero. En esos dos tramos se suelen concentrar los estrenos de nuevos programas.

También pasa con las redacciones de los periódicos, dado que son los momentos del calendario anual donde hay más movimiento de noticias políticas, de sociedad o deportivas.

Los picos de contratación no son aleatorios.

1) Temporada de Febrero – Junio

Es uno de los momentos más fuertes del año. ¿Por qué?

• Las cadenas vuelven del parón navideño.
• Se aprueban nuevos presupuestos y se renuevan programas.
• Empiezan desarrollos y preproducciones que se emitirán entre septiembre y octubre.
• Hay movimientos internos: bajas, cambios de equipo, gente que se va a otros proyectos.

👉 Momento óptimo para enviar tu CV: 01 de diciembre – 31 de enero.
(Justo cuando están cerrando equipos para arrancar el año y todavía no han contratado a todo el mundo).

2) Temporada de Septiembre – Octubre

Este es el gran “reset” del año audiovisual. Concide prácticamente con el calendario escolar.

• La mayor parte de los formatos fuertes de entretenimiento, factual y magazines estrenan en septiembre.
• Las productoras necesitan reforzar equipos para programas nuevos o renovados.
• Durante agosto muchos contratos se terminan y la gente se mueve, así que se abren huecos reales en redacciones.

👉 Momento óptimo para enviar tu CV: 01 de julio – 31 de septiembre.
(Este periodo pilla el momento en que todavía no han cerrado equipos y hay urgencia de contratar).

Finalmente, recalcar algo. Aunque estos sean los momentos más sonados del año, no quita que en un día puntual de otro mes requieran de personal. Por eso siempre hay que estar atento a cualquier oportunidad.

4. «¿Cómo empiezo a usar LinkedIn para que me conozcan si aún no tengo contactos?»

1. Copia el mapa de contactos de tus referentes.
   Elige 2-3 profesionales potentes del audiovisual. Entra en sus perfiles, abre la pestaña “Contactos” y empieza a enviar solicitudes cada día.
   Hazlo como una rutina diaria de 10 minutos: 20-30 invitaciones diarias.
   Estarás construyendo una red afín a tus referentes, y por tanto, afín a tu perfil. Ojo. Ten cuidado con enviar demasiadas en un día, LinkedIn te puede capar por Spam. La clave es que se vea natural, equilibrado, sin saturar.
2. Publica aunque al principio no te lean.
   para adquirir mayor presencia, no hay trucos más allá de publicar posts. Necesitas visibilidad. Y la visibilidad llega por constancia.
   Un post a la semana mínimo. Mejor si son tres.
   Temas sencillos: aprendizajes de rodajes, errores comunes, dudas reales, consejos que a ti te habrían salvado. Escritos si quieres en primera persona.
3. Interacciona con tu gente.
   Comenta 5-10 publicaciones diarias de gente del audiovisual.
   No escribas “gran post”. Aporta una idea, un matiz o una experiencia.

Esto está respaldado con solidez no solo por el conocimiento popular, sino por la literatura científica.

En 1968, un investigador llamado Robert Zajonc descubre el famoso efecto de mera exposición. Es decir, cuanto más vemos a alguien, más nos gusta, incluso aunque no interactuemos con esa persona. Por tanto, la familiaridad genera afecto, y ese afecto, genera persuasión.

La fórmula sería: red + publicaciones + interacción.
En 30 días se nota. En 90, te llevarás más de una alegría.

5. «¿Cómo buscar un productor o coproductor para mi largo/cortometraje?»

Lo primero que puedes hacer es acudir a los listados de productoras de las FilmOffices pronviciales de cualquier parte de España.

Por ejemplo, aquí tienes el listado de productoras de de cine, tele, animación, eventos, decorado, maquinaria, etc., de Madrid.
Por aquí te dejo también las de Cataluña.

Pero en el resto de provincias también hay. Teclea en Google "listado productoras __(tu provincia)__ Film Office/Commission". Y te saldrá.

Por otro lado, tienes la Spain Film Commission, que también puede darte norte.

Otra vía es encontrarlo a la inversa: localizar proyectos audiovisuales similares al tuyo, ver qué productora lo ha hecho, y buscar su contacto (normalmente en su web o LinkedIn). Así estás más cerca de predecir que tu proyecto les gustará, por la razón de que ya han apostado por algo muy parecido.

Por ejemplo.

Hace unos meses decidí poner en marcha un proyecto documental sobre un aventurero encarcelado en una de las prisiones más peligrosas del mundo.

Hice una batida de investigación sobre proyectos similares. Encontré en Netflix un documental que utilizaba exactamente el enfoque narrativo que yo buscaba. Se trataba de las «Cintas de Rosa Peral». Vi que quienes estaban detrás era Brutal Media, la productora española de la BBC.

Voy a LinkedIn y busco a algunos de sus responsables. Encuentro al encargado de desarrollo y le chateo por mensaje directo. Le suscita interés y agendamos videollamada para conocernos y hablar en profundidad del proyecto.

Meses más tarde, decidieron quedárselo y pasamos a firmar la oportuna cesión de derechos. Actualmente, el documental está en fase de preventa con cadenas. Quizá no llegue a verse en pantalla y se quede en el camino (porque este proceso es más largo que un día sin pan), pero este ejemplo muestra cómo es posible encontrar un productor o coproductor haciendo esa búsqueda inversa.

6. «Llevo tiempo trabajando en el sector y estoy desempleado, ¿cuál es el mejor camino para conseguir proyectos nuevos?»

Caminos hay varios. Lo más sensato es elegir aquel con el que uno se sienta más cómodo/a, o fiel a sí mismo.

El hecho es que en muchas ocasiones los nuevos proyectos audiovisuales no llegan a ofertarse online. Se mueven en una línea subterránea de contactos y recomendaciones.

Por ello, la estrategia de escribir a puerta fría suele ser un buen punto de apoyo para seguir avanzando. Si no lo haces, el «no» lo tienes garantizado. Hacerlo te ofrece alguna posibilidad, aunque sea baja. Puestos a elegir, me agarraría a esa posibilidad.

Para digerirlo, te enseñaré los mensajes que escribí para predisponer a una empresa a patrocinar FilmTalents. En definitiva, esto aplica igual para conseguir proyectos nuevos en cualquier ámbito.

Pero quiero aclararte algo: antes de ofrecer nada, ni pedir nada, ni buscar nada, tienes que interesarte por la otra persona. En definitiva, tenéis que conoceros. El reto es generar ese acercamiento casi de forma desinteresada. No huelas a venta ni a desesperación, porque puede causar el efecto contrario. La idea es transmitir confianza. Porque al fin y al cabo, es ley de vida: las personas contratamos a otras personas cuando nos transmiten confianza. Cuando empatizamos. Cuando cumplen nuestras expectativas.

Y esto no lo digo yo. En el siglo XX, investigadores de la talla de Donn Byrne o Robert Cialdini ya empezaban a hablar del principio psicológico de simpatía o "liking", esto es, que tendemos a decir sí a personas que nos gustan, que son cercanas, o similares a nosotros.

Así que dicho esto, veamos la secuencia de mensajes reales que pueden inspirarte:

1º - Le solicito conexión en LinkedIn el jueves 20 de febrero de 2025.

Me acepta y le mensajeo ese mismo jueves 20.02.2025:

¡Arturo! Un placer conectar.
Me encanta todo el valor que dais al sector con (su empresa).
Me gustaría preguntarte una cosa, ¿te pillo mal?

2º Me responde esto:

Gracias, José Manuel.
Mejor contactarme por mail directo a (mail corporativo).
Gracias!

Pum. Ya tengo otra vía más de contacto donde hay más posibilidades de que me atienda.

3º Automáticamente le escribo por email:

¡Hola Arturo!
Soy José Manuel, el de LinkedIn que te ha escrito esta mañana.

Hoy he visto que tenéis un faldón publicitario en la newsletter de xxxxx. Por eso he pensado que os podría interesar llegar a la comunidad de xxxxxx, [PROPUESTA DE VALOR Y POR QUÉ LES PUEDE INTERESAR A ELLOS]

Desconozco si es contigo con quien tengo que hablar esto, pero te digo las métricas de los últimos 90 días:

[MÉTRICAS y DATOS]

Con estos números, ¿crees que podría ayudaros a conseguir más suscriptores a vuestro catálogo? [BENEFICIO PARA ELLOS]

Un abrazo.

Observa la estructura y la pregunta final.

El único objetivo con ese mail es que me conteste y me cuente su situación. Así puedo personalizar aún más la propuesta y encajarla en su situación actual. 

Pero todo no iba a ser de color de rosa. En este punto, ocurre el primer altercado. 

Me llega una respuesta automática de que Arturo está fuera de la oficina y no leerá mi mensaje hasta el lunes 24 de febrero.

4 días después, le hago seguimiento:  

¡Qué tal, Arturo!
¿Crees que es inviable que hagamos esto juntos?
Gracias.

Tan solo un rato más tarde, recibo esta contestación por su parte: 

Hola José Manuel, disculpa el retraso en contestar, muy liados. Podría haber interés pero necesitaríamos saber condiciones, (ME CUENTA SU SITUACIÓN).
Ya nos cuentas y hablamos. Si puedes, esta tarde a partir de las 16h tengo espacio, si te viene bien, podemos charlar, o me llamas o te llamo. Gracias!

¡BINGO! Ya he conseguido una reunión. Durante esa llamada, nos conocimos a fondo y estudiamos juntos la manera de adaptar mi propuesta a su situación actual. 

Todo esto transcurrió en unos 5-7 días. 

En otras palabras: en una semana pude abrir una nueva oportunidad laboral.
Así que espero que este caso te inspire.

7. «No tengo experiencia demostrable para hacerme un buen portfolio, ¿qué podría hacer?»

No tendrás experiencia, pero seguro que sabes hacer muchas cosas. Enséñalo.

La mayoría de personas piensan que un porfolio solo se construye con trabajos pagados, pero no, se construye mostrando lo que sabes hacer, aunque aún no te hayan contratado.

1) Enseña tu proceso, no solo resultados

Hay un caso famoso: Austin Kleon.
Hacía viñetas y pintaba cuadros, pero no vendía, nadie lo contrataba, y estaba frustrado.
¿Qué hizo?
Empezó a publicar su proceso: bocetos, dudas, errores, aprendizajes, reflexiones.
Sin clientes, sin encargos. Solo mostrar cómo trabajaba.
Años después, reunió todo eso y creó “Roba como un artista”, que terminó siendo un bestseller mundial.
Le contrataron después de enseñar cómo trabajaba, no antes.

2) Convierte tus «casi sí» en contenido

Te cuento otro caso real.
Un guionista del grupo de FilmTalents me escribió porque había estado a punto de entrar en Disney+ y RTVE, pero se quedó a las puertas.
No podía ponerlo en su currículum porque no llegó a firmar.
¿Sabes qué hizo?
Preparó un porfolio donde explicaba el proceso por el que había pasado:

• cómo planteó la biblia,
• qué cambios le pidieron,
• qué aprendizajes sacó,
• qué versiones entregó,
• qué habría mejorado ahora.

Ese porfolio, basado en “casi sí”, le dio más credibilidad que un listado vacío de trabajos. Y sobre todo, una de las cosas muy valiosas es que en ese portofolio se veía cómo escribía: era un maestro describiendo cosas, creando escenas memorables y convirtiendo su propia vida en un guion cinematográfico. Precisamente, esta presentación deja entrever su habilidad.

Por eso aunque no hubiera entrado, demostraba cómo piensa, cómo escribe y cómo trabaja bajo presión.

En definitiva, tu porfolio no solo es lo que te han dejado hacer, sino lo que tú eres capaz de ejecutar.

Por eso no hace falta esperar a que alguien te contrate para demostrarlo.
Puedes hacerlo ya mismo:

• Creando una pieza de 1 minuto donde se vea cómo grabas.
• Compartiendo capturas del antes/después de una edición.
• Subiendo una historieta de: “Cómo escribí esta secuencia en 3 pasos”.
• Grabando una reflexión: “lo que aprendí haciendo mi primer piloto”.
• Haciendo un análisis de color, de sonido, de guion, lo que sea, de algo que ya exista en el mercado, y reformartearlo bajo tu precisa mirada.

Si quieres una pregunta que te abra más posibilidad para idear tu porfolio, responde a esta:

“¿Qué ocurre en la cabeza de esta persona cuando se pone a trabajar?”

Y eso puedes enseñarlo sin experiencia y desde hoy.

8. «Llevo tiempo solicitando ofertas de trabajo y aunque me han salido pocas entrevistas, no sé por qué no acabo siendo seleccionado/a»

Lo primero decirte que no estás solo. Lo que te está pasando no es un síntoma de que no valgas, sino un síntoma del sector tal y como funciona hoy. El audiovisual es una industria donde la demanda de talento supera por mucho la oferta de puestos, y donde la mayoría de candidaturas mueren antes incluso de ser leídas.

Pero siempre es recomendable ser autocríticos.
Así que vamos a ver qué parámetros podríamos revisar en este caso:

A) Piensa dónde estás aplicando y a quién.
¿Qué tipo de productora es? si es una productora pequeña compites con menos gente. Si envías tu CV a Mediapro, Secuoya, Fremantle, Buendía… compites con cientos. Si envías tu CV a una productora de 6–12 empleados, compites con decenas o menos.
Eso no significa renunciar a lo grande.
Significa estrategia: combinar ambas ligas para aumentar probabilidades.

B) Pregúntate a cuántas empresas le has solicitado.
A veces, es cuestión de estadísticas. Hay que solicitar 100 para que salga 1. Pero 100 de verdad, una tras otra.

C) ¿Qué plataformas estás usando?
Si usas LinkedIn, Infojobs y demás, tienes que considerar algo. Estos algoritmos suelen tener filtros que descartan automáticamente a candidatos si en su perfil o curriculum no contemplan varias palabras clave para el puesto al que aspiran. ¿Tu curriculum contiene las palabras clave para el puesto?

D) Cada vez que recibas un «no», haz esto.
Los mejores profesionales no son los que nunca fallan, sino los que corrigen más rápido. Pregúntales con honestidad a la empresa por qué ha decidido descartar tu candidatura, para así poder mejorar tu propuesta en próximas veces.

Pero sobre todo, no te culpes. A veces no te eligen no porque no tengas talento, sino porque conocían a alguien previamente, porque alguien les generó cierta simpatía o por factores que nada tienen que ver contigo. Los reclutadores también tienen sus sesgos,

9. «¿Cómo conseguir financiación para mi proyecto de ficción o documental?»

Este tema bien merece un reportaje aparte. Porque es extenso y profundo.
Pero en término generales, estas son las principales vías de financiación audiovisual:

• SUBVENCIONES PÚBLICAS (Ministerio de Cultura, Comunidades Autónomas, Ayuntamientos, etc.)
• VENTA ANTICIPADA DE DERECHOS A TELEVISIONES (Convocatorias como Canal Sur Produce, RTVE Promueve, etc.)
• DEPARTAMENTO DE ADQUISICIÓN DE TELEVISIONES Y PLATAFORMAS: (o bien el producto está ya terminado o también pueden producirlo como un original, costeando el presupuesto a cambio de quedarse la titularidad de los derechos)
• BANCOS (DEUDA): CREA SGR, TRIODOS BANK, ICO, ENISA
• INVERSORES PRIVADOS POR DEDUCCIÓN FISCAL
• PATROCINADORES
• CROWDFUNDING (plataformas como SEGO CREATIVE)
• SETT (Sociedad Española para la Transformación Tecnológica)

Pongamos algunos ejemplos prácticos que hemos conocido recientemente:

La serie de ficción ‘El clan Olimpia’ (Disney+) desgranó su modelo de financiación en el marco de la quinta edición de Iberseries & Platino Industria, tras su estreno en Disney+ el pasado mes de julio en España y Latinoamérica.

La propiedad intelectual de la serie se ha repartido entre las tres compañías productoras y la serie se financió a base de preventas e incentivo fiscal, dado que se grabó en País Vasco.

Por otro lado, tenemos el caso de el documental ‘El enigma Inés’, el cual logró en pocos minutos los 18.000 euros requeridos en la plataforma de financiación Sego Creative.

Como veis, las alternativas son diversas. La clave es poder combinarlas de la manera más equilibrada y realista posible para costear el presupuesto proyectado.

10. «¿Dónde puedo encontrar más ofertas de trabajo aparte de los portales oficiales?»

• En grupos de Telegram/WhatsaApp como el de FilmTalents. Si aún no te has integrado, clica aquí para unirte.
• En foros y asociaciones como FAGA (Foro de Asociaciones de Guionistas Audiovisuales) o ALMA (Sindicato de Guionistas).
• Dependiendo del puesto de trabajo al que aspires, también puedes encontrar en:
  • ADAE (Asociación profesional de documentalistas)
  • AMAE (Asociación de montadores y editores)
  • AEC (Asociación española de Directores de Fotografía)
  • APPA (Asociación de Profesionales de la Producción Audiovisual)
  • PNR (Plataforma de Nuevos Realizadores)
  • CIMA (Asociación de mujeres cineastas)
  • Son de Casting (Agencia de figuración y actores).
• También puedes ojear las bolsas de empleo del Spain Hub Audiovisual.

11. «¿Qué puedo hacer para enseñar mi trabajo y que conozcan mejor lo que hago?»

Hay mucha gente que opta por abrirse un canal de Instagram o TikTok.
Esto es como encender un altavoz en medio de un barrio. O como prender una parrilla en la azotea y oler cómo los vecinos se asoman. Me pillas, ¿verdad?

Mira, más del 60% de la población mundial consume a diario vídeos cortos en redes sociales, según Ampere Analysis.
Hasta las propias cadenas y plataformas de streaming están atentos a lo que ocurre en redes para detectar tendencias, talentos e ideas frescas.

Es más, ya se están dando casos de adaptaciones televisivas de formatos de youtube, como el caso de los juegos del youtuber MrBeast, los cuales han sido comprados por Amazon Prime para crear un nuevo programa de entretenimiento.

El caso es que esta es la ventana más accesible para conseguir que tu próximo jefe te encuentre.

Veamos el ejemplo real de la fotógrafa Elena Ventura.

Elena es una chica de Barcelona que se hizo autónoma para dedicarse a su pasión: la fotografía profesional para marcas. Como todos, al principio su cartera de clientes no era muy amplia.

Así que decidió compartir su proceso con naturalidad, grabándose su día a día, narrando sus cosas como quien le cuenta a un amigo en qué anda trabajando. Con sus altibajos, sus idas y venidas. Así tal cual, enseñando su evolución para conectar con más gente y atraer al tipo de perfiles que podrían contratarla.

En cuestión de meses, aumentó las personas que la descubrían. Empezaron a llegarle ofertas: «me encanta lo que haces, ¿lo harías para nosotros?»; «oye, ¿qué tal si colaboramos en este evento?».

Esa constancia le hizo facturar más de lo que quizá había planteado en un principio. Y llegar a los 42.000 seguidores.

Pues eso. Mostrarse para que te conozcan es sembrar la semilla de tu próximo trabajo.

12. «¿Qué puedo hacer en los "momentos valle" donde no tengo proyectos profesionales a la vista?»

Además de desagradables, los momentos valle cuaundo no se tiene proyecto a la vista sirven también para recalibrar nuestra carrera. Son momentos de detenernos a pensar hacia dónde queremos dirigirnos. Si venimos haciéndolo bien, y dónde podemos seguir estando.

Es cierto que son momentos duros, de bajón incluso. Pero muchos intentan aprovecharlos para sumar razones que les acerquen a su nueva oportunidad, porque crecer profesionalmente es decidir qué hacer cuando no estás rodando.

• Escribir proyectos propios.
• Estudiar nuevas herramientas.
• Fortalecer relaciones con gente que hayas conocido.
• Generar contenido para que otros te descubran.
• Ofrecer y servir de ayuda para otros.

En definitiva, seguir en movimiento. Haciendo girar la rueda una vuelta más.

Veamos el caso de la actriz convertira a productora que pasó de tener que inventarse proyectos para sobrevivir a ser una reconocida millonaria de Hollywood. Hablo de Issa Rae y "el momento valle" que catapultó su carrera hacia HBO.

Antes de crear Insecure —serie nominada a los Emmy y considerada una de las más influyentes de la década— Issa Rae estuvo a punto de dejarlo.

En varias entrevistas cuenta que se sentía perdida y sin oportundiades reales. Cita momentos de duda y frustración profunda antes de empezar la webserie, donde nadie le daba una oportunidad. Además, su piloto de serie había sido rechazado.

Escribió su propio proyecto, sin encargos ni productores pendientes.
Comenzó un blog y terminó escribiendo una webserie llamada The Misadventures of Awkward Black Girl.

Lo que empezó como un proyecto hecho “en tiempo muerto”, terminó atrayendo a millones de visualizaciones. Se hizo viral en Youtube consechando una gran base de fans enamorados de su proyecto. Todo lo hacía ella: grabar, actuar, editar.

Agentes empezaron a contactarla.
Hasta que HBO llamó.

Hoy en día es una de las celebritis más aclamadas de la industria estadounidense.