Los 12 errores más comunes que provocan que las productoras digan NO a tu documental

Por cada documental que he vendido, diez me han rechazado.

Es la punta del iceberg de un trabajo silencioso. Detrás de un «sí», hay una montaña entera de trabajo que nadie ve.

Hoy quiero mostrar lo que realmente ocurre detrás de cada rechazo.

¿De verdad el rechazo es tan gigante como parece?

Vamos a ver los errores más típicos que te alejan del sueño de ver tu proyecto en pantalla.

1. No tener todos los derechos asegurados

Sin control legal sobre la historia, cualquier cadena o productora lo podría ver como un riesgo asociado.

2. Conflictos de derechos con terceros

Si hay otras personas involucradas reclamando propiedad intelectual o un «trozo del pastel», la negociación puede bloquearse.

Esto ocurre, por ejemplo, cuando se han escrito varios libros al respecto de varios autores diferentes, o editoriales, podcast o similar con cláusulas explícitas sobre la transformación de la obra al audiovisual.

3. No tener confirmada la participación de los personajes

Sin un «sí» claro y documentado mediante una carta de interés o compromiso de participación, el proyecto se ve demasiado incierto.

4. No tener suficiente material de archivo o información inédita

Las imágenes, audios o archivos que no están en internet, son gasolina para el motor de cualquier documental. Te da ventaja frente al 95% de los pitch que reciben las productoras.

5. ¿Involucra a caras conocidas o famosos?

Si tu historia incorpora a personas famosas o caras conocidas por el público, el proyecto gana atractivo para las productoras y cadenas.
¿Por qué? Sencillo. Lo que todos quieren es ganar audiencia, y los famosos son buena garantía de que se la traerán.

6. La premisa no engancha en las 2 primeras frases

Si en 1 minuto no eres capaz de contar tu historia y por qué habría que invertir en ella, corres el riesgo de que pierdan interés en ti.

7. No contar la historia al completo: principio, desarrollo y final

Muchas personas cometen el error de empezar diciendo: «pues esto es una historia de lucha y coraje, que conecta con su esencia inspiradora...blablablá».
En un pitch siempre desvelamos todos los entresijos de la historia. Le estamos diciendo a la productora o cadena qué truco de magia voy a hacer.

8. No haber visionado documentales o películas similares

Si no has estudiado obras parecidas a la tuya, no conoces el terreno que pisas. Esto hace que tu propuesta pueda ser redundante, poco innovadora o que repita errores narrativos que otros ya cometieron.
Las productoras quieren ver que dominas el panorama y que tu historia aporta algo nuevo, no una copia inconsciente de lo que ya existe.

9. No ser producible dentro de un presupuesto realista

Si el coste que propones es muy superior al valor comercial percibido, o no se ajusta a los recursos de la productora o cadena, tu proyecto se vuelve inviable.

10. No conocer a quién le estás proponiendo el proyecto

Presentar tu documental sin investigar a la productora o cadena a fond, es como
lanzar una flecha con los ojos cerrados. Cada comprador tiene su línea editorial,
géneros favoritos, restricciones legales y públicos específicos. Si tu propuesta
no encaja con su perfil, la descartarán sin mirarla dos veces. Conocer su
catálogo, estilo y necesidades actuales, te permite adaptar el pitch para que
encaje como un traje hecho a medida.

11. No pensar en cómo la productora va a revender tu propuesta

El proceso de sacar adelante un proyecto audiovisual normalmente es un camino en el que hay que vender dos veces: primero a la productora, y luego a la cadena. A la productora se lo vendes tú. Pero si ellos no pueden venderlo a otros, no te lo comprarán.

12. No tener un dosier claro ni un tratamiento de guion sólido

Sin una estructura global del proyecto, sin una investigación profunda y un estudio previo de viabilidad técnica y de producción (que todo lo que plantea sea alcanzable en todos los aspectos), tu proyecto se debilita y hace aguas.